Poder ideológico innova Currículo Nacional Bolivariano en Venezuela

Por. Héctor Vargas

Investigadora y docente universitaria rechaza la innovación educacional del gobierno venezolano, basándose en la ausencia del consenso magisterial.

La República Bolivariana de Venezuela vive momentos de profundas transformaciones basadas en la educación, fundamentada en el desarrollo integral del nuevo ser social humanista y ambientalista, bajo la implementación del nuevo Currículo Nacional Bolivariano (CNB), definiéndose como un proceso político y socializador que se genera de las relaciones entre escuela, familia y comunidad, donde el desarrollo de conocimientos, valores y actitudes son imprescindibles para la sociedad.

Impresiones tomadas de la científica y docente Gladys Niño, adscrita a la Universidad de Los Andes ULA-Táchira, reaccionó frente al Currículo Nacional Bolivariano, manifestando descontento e indignación por la praxis actual de la educación en Venezuela, en la que se comienza a tener opositores y, por supuesto a recibir críticas sobre el proceso y ejecución por parte del Ministerio del POder Popular para la Educación (MPPE).

A su vez la licenciada Gladys habla libremente del CNB, y comentó que no hay un sector en la sociedad venezolana, sobre todo en un sector vinculado al magisterio que piense que, no se trata de una innovación que este dirigida a mejorar las condiciones del maestro, de los alumnos y del los padres y representantes, sino que está ligada directamente a una postura política totalmente gubernamental politizada.

“Que el currículo se le va de las manos al gobierno, porque lamentablemente su componente de carácter ideológico lo desnaturaliza como innovación y como iniciativa educativa”, dijo Gladys Niño.

También acotó que este sistema educativo no es positivo ya que no se ha tomado en cuenta la opinión del maestro, la opinión del profesorado universitario, ya que ellos forman a los futuros profesionales, asimismo tomar las impresiones del estudiantado, por eso se habla de un consenso. Un consenso participativo en el que se planteen las ideas de cada ciudadano.

Si el gobierno evaluara un poco, con más clama, con más tiempo y con más respeto si se quiere, del conglomerado adscrito al Ministerio de Educación, tanto superior como el Ministerio de Educación de Cultura y Deporte (MECD) y, si el gobierno reflexiona y, hace una convocatoria para que las universidades opinen, tomando en cuenta al gremio, se llegaría a la posibilidad de consenso, y podría ésta innovación tomar un rumbo poco más certero y concreto.

“Este ideal comienza a transformarse en una camisa de fuerza para el futuro profesional y docente”, declaró la docente.

A lo largo de sus comentarios, Niño expresaba la facilidad con la que el gobierno a tomado este tema, y lo que no se concibe a carne viva es que un docente, después de estar graduado deba aprehender nuevos sistemas de educación, de carácter ideológico para adaptarlos a los nuevos programas y contenidos en las áreas disciplinares.

De carácter primordial sería tocar el tema con los representantes, con los padres de familia, quienes son los principales autores de la sociedad, y sustentar toda información acerca del Currículo Nacional Bolivariano, donde lo conozcan, lo estudien y se fundamenten para opinar sobre este proceso revolucionario de gobierno de Venezuela.

En consecuencia, el estudiantado universitario debe informarse, buscar el material adecuado que está produciendo el Ministerio de Educación (ME), en exigir la divulgación del problema como: foros, seminarios y que haya mayor información en los Medios de Comunicación.